Entre récords y residuos: diwali en la india desafía la calidad del aire

Entre récords y residuos: diwali en la india desafía la calidad del aire
Diwali

En la India, el domingo pasado se celebró el Diwali, rompiendo un récord mundial Guinness con la iluminación de millones de lámparas de aceite de barro. Sin embargo, esta festividad coincidió con un aumento de las preocupaciones sobre la calidad del aire en el país.

En todo el país, las luces multicolores decoraron hogares y calles en honor al festival hindú anual de la luz, que simboliza la victoria de la luz sobre la oscuridad. Pero la verdadera magnificencia se vivió en el río Saryu, en Ayodhya, en el estado de Uttar Pradesh, lugar de nacimiento del dios Ram, la deidad más venerada del hinduismo.

Al caer la noche del sábado, los devotos encendieron más de 2.22 millones de lámparas de aceite y las mantuvieron encendidas durante 45 minutos mientras los himnos religiosos resonaban a lo largo de las orillas del río. Este impresionante espectáculo estableció un nuevo récord mundial, superando el año anterior donde se encendieron 1.5 millones de lámparas. Como prueba de esta hazaña, representantes del Libro Guinness de los Récords Mundiales entregaron un certificado al principal funcionario electo del estado, Yogi Adityanath.

Más de 24,000 voluntarios, en su mayoría estudiantes universitarios, se unieron para hacer posible este nuevo récord. Pratibha Goyal, vicerrectora de la Universidad Dr. Ram Manohar Lohia Avadh en Ayodhya, fue una de las organizadoras destacadas.

El Diwali, considerado un feriado nacional en la India, es una ocasión para socializar y compartir regalos con familiares y amigos. Muchos encienden lámparas de aceite de barro o velas, y se lanzan fuegos artificiales como parte de las celebraciones. Además, se dedica una oración especial a la diosa hindú Lakshmi, conocida por traer buena suerte y prosperidad.

Durante todo el fin de semana, las autoridades pusieron en marcha trenes adicionales para acomodar la gran cantidad de personas que querían regresar a sus ciudades natales y unirse a las celebraciones familiares.

Sin embargo, el festival llegó en un momento en que las preocupaciones sobre la calidad del aire en la India estaban en aumento. La semana pasada, se registró un nivel peligrosamente alto de 400-500 en el índice de calidad del aire, más de 10 veces por encima del umbral de seguridad global. Estos niveles pueden causar problemas respiratorios graves como bronquitis y asma. Aunque el sábado hubo una inesperada lluvia y un fuerte viento que mejoraron los niveles a 220, según la Junta Central de Control de la Contaminación del gobierno.

Sin embargo, se espera que los niveles de contaminación aumenten nuevamente después del fin de las celebraciones del domingo por la noche debido al uso de fuegos artificiales.

La semana pasada, en un intento por reducir la peor niebla y smog de la temporada, los funcionarios en Nueva Delhi cerraron las escuelas primarias y prohibieron los vehículos contaminantes y los trabajos de construcción. Esta situación ha causado problemas respiratorios a los residentes y ha envuelto monumentos y edificios altos en y alrededor de la capital de la India.