Genes, picos y zambullidas: el fascinante mundo de los martines pescadores!
Los martines pescadores son aves fascinantes que no solo son capaces de sumergirse a gran velocidad para atrapar a sus presas, sino que lo hacen sin sufrir daños cerebrales. ¿Cómo es posible esto? La respuesta podría estar en su genética.
Recientes investigaciones han revelado que estas aves poseen genes modificados relacionados con la dieta y la estructura cerebral. Específicamente, se han identificado mutaciones en genes asociados con las proteínas tau, que son las encargadas de estabilizar la estructura de las neuronas. Esto podría explicar por qué los martines pescadores no sufren conmociones cerebrales a pesar de sus zambullidas constantes.
Pero estos fascinantes pájaros no son los únicos en el reino aviar que han llamado la atención de los científicos. Las sules y los pájaros carpinteros también han despertado el interés de los investigadores. En un estudio realizado por físicos de Virginia Tech, se analizó cómo las sules se sumergen al plegar sus alas y golpear el agua con todo su cuerpo para capturar a sus presas. Aunque este comportamiento implica un estrés enorme, las sules logran repetir esta proeza sin lesionarse, al igual que los martines pescadores.
El equipo de Sunny Jung, por ejemplo, realizó un análisis detallado de una sule del Museo de Historia Natural del Smithsonian. Utilizando cámaras de alta velocidad, pudieron registrar el comportamiento de la sule al sumergirse. Descubrieron que la fase más peligrosa de la inmersión es cuando la cabeza está bajo el agua pero el cuerpo todavía está en el aire, ya que esto genera una gran presión en el cuello.
Por otro lado, los martines pescadores tienen picos con una forma muy específica: son alargados y finos, lo que les permite penetrar el agua sin generar ondas de compresión. Esta característica ha sido objeto de estudio tanto en el campo de la biología como en el de la ingeniería. De hecho, los trenes de alta velocidad japoneses han adaptado su diseño basándose en el pico del martin pescador, lo que les ha permitido reducir la presión del aire y aumentar su velocidad.
Un estudio realizado en 2019 por la Universidad de Bangor confirmó la importancia de la forma del pico de los martines pescadores durante la inmersión. Utilizando modelos impresos en 3D de picos de diferentes especies, los investigadores concluyeron que las formas más alargadas y finas eran las más eficientes.
Sin embargo, la forma del pico no es el único misterio resuelto. Las investigaciones actuales se centran en las influencias genéticas que permiten a los martines pescadores sumergirse sin sufrir lesiones cerebrales. Se ha descubierto que poseen mutaciones en el gen MAPT, que está relacionado con las proteínas tau. Estas proteínas, cuando funcionan correctamente, pueden proteger contra las conmociones cerebrales, tal como se ha observado en otras aves.
